Descubre 5 trucos para coser piezas de tela mezclilla

Existen ocasiones en las que tenemos que hacer algún tipo de arreglo a una prenda, pero no sabemos cómo realizarlo o está hecha de un material que resulta complicado para su manejo.

Un ejemplo de esto es la ropa de tela mezclilla, pues si bien cuenta con la ventaja de ser un tejido resistente, también nos enfrentamos a un material que no se cose con facilidad.

Ahora bien, este tipo de tela no es la única que se caracteriza por ser fuerte y durable, así como compleja al momento de coser, algunas como la felpa, la lona o la pana también tienen esta condición. Por lo que, a continuación, revisaremos 5 trucos para poder trabajar este tipo de telas.

1. Lavado previo

Esto no es únicamente por limpieza, al lavar la tela la podemos manipular de forma mucho más sencilla que si lo hacemos en seco; además, no se corre el riesgo de que se encoja, pues la costura se hará posterior al proceso de lavado. 

2. Selección de hilos y agujas

Si tratamos de coser tela mezclilla, no deberíamos utilizar el mismo hilo ni las mismas agujas que para otros materiales. Hay que conseguir hilo que tenga resistencia, evitando aquellos que resulten muy delgados, pues, además de que no podrá entrar de manera sencilla, se puede romper.

El caso de las agujas es un tema particular, pues existen diversos tamaños. Estas se miden por grosor, por lo que, en casos de telas fuertes como la mezclilla, conviene usar las agujas de 100. En cuanto a las tijeras, es necesario disponer de unas que faciliten el corte, sin embargo, hay que evitar querer cortar en patrones, pues el mismo grosor hará que dañemos las telas. 

3. Uso de calzador

Si la costura que tenemos pensada solo abarca un pequeño espacio de mayor grosor, podemos hacer uso del calzador para que sea más sencillo el proceso. El calzador se conforma de tres pequeñas placas hechas de plástico que se colocan debajo del prensatelas, ayudando a que se mantengan a la misma altura y la máquina pueda trabajar bien.

4. Realiza una costura manual

Esto no tiene nada que ver con que tomemos el hilo y aguja para trabajar, estamos hablando de una técnica en la cual poco a poco vamos girando el volante de la máquina hacia nosotros y despegando el pie del pedal, para poder trabajar con las zonas de mayor grosor. 

5. Usar prensatelas específicos

En ocasiones podemos encontrar algunos problemas dentro de la máquina y por eso no puede arrastrarse de la mejor manera el hilo. Para telas que resultan muy gruesas, podemos considerar la opción de usar prensatelas de doble arrastre.

Ahora bien, antes de empezar a trabajar con alguna tela de este estilo, es necesario revisar que no tenga imperfecciones, ya que lo anterior podría ocasionar que no se puedan coser fácilmente o se dañe la máquina. También es importante que al finalizar se planchen las zonas que quedaron de mayor volumen para hacerlo más estético. 

Estos son algunos consejos que podemos aplicar en la costura de prendas de gran grosor. Además, para complementar, es necesario que se cosa con firmeza y cuidado, pues de esta manera sujetaremos bien la tela, evitando realizar malos acabados.